El estudio fue presentado y entregado en mano a la delegación de los vecinos de Amara por parte del Ayuntamiento de Donostia-San Sebastián.
La alternativa más favorable se considera la nº3 en cuanto a impacto y distribución de tráficos, que consiste en eliminar por completo los viaductos de entrada y salida de Carlos I. Adicionalmente se realizaría una entrada desde la variante en ambos sentidos en Marrutxipi (cocheras de autobuses urbanos), que permite una entrada a la parte este la ciudad liberando el tráfico la parte del río.
Por otro lado, la rotonda de Martutene de la Autovía del Urumea necesitaría un vial pasante para descongestionar la rotonda ya inicialmente insuficiente.
Ambas intervenciones tienen sentido y son necesarias por sí solas además de ayudar a distribuir mejor el tráfico tras la eliminación de Carlos I.